viernes, 5 de mayo de 2017

Isaías 6:8



“Después oí la voz del Señor, que decía: ¿A quién enviaré, y quién irá por nosotros? Entonces respondí yo: Heme aquí, envíame a mí” (Isaías 6:8).

Si vas por el camino difícil, es porque vas por el camino correcto y la dirección que te llevará a grandes cosas.

Nuestra voluntad de ayudar, no siempre es de las mejores, y esperamos ver una catástrofe para que nuestro pobre corazón sea afectado. La voluntad de ayudar, no siempre es nuestra primera prioridad, y eso lo vemos a diario, cuando personas menesterosas golpean la puerta de nuestra casa, a quienes no le damos lo mejor que tenemos, más bien, damos lo que nos sobra.

El egoísmo personal controla al mundo actual y muchas veces nos contaminamos de ingratitud, inclusive dentro de las necesidades de nuestra propia familia. 

Este pasaje habla de la purificación del profeta Isaías, antes de llevar el mensaje de La Palabra. De la misma forma nos recuerda la prioridad de cumplir con la Gran Comisión del Señor resucitado de llevar y proclamar el evangelio de la salvación a todo el mundo.

Si esta promesa cautiva tu corazón y deseas comprometerte con llevar Palabra de salvación, entonces vas por el camino correcto y puedes responder con el profeta Isaías: Heme aquí, envíame a mí”.


¡Gracia y Paz!

Pan de Vida

lunes, 1 de mayo de 2017

Colosenses 2:16-17


¡ESTO ES CRISTO!

Colosenses 2:16-17
No dejen que nadie los critique por lo que comen o beben, o porque no celebran ciertas fiestas ni respetan los días de luna nueva o de descanso. Todo eso no era más que la sombra engañosa de lo que estaba por venir. Lo real y verdadero es Cristo.

El seguir a Cristo me ha permitido dejar atrás malos hábitos y vicios. Ha transformado mi forma de pensar, mi forma de amar, mi forma de vivir. He aprendido a valorar lo importante y a despojarme día a día de lo no importante. En este camino de aprendizaje, me he topado con personas que no aprueban los cambios o “ajustes” que he realizado en mi vida. Por ejemplo: algunos piensan que soy muy exagerado porque decidí dejar de tomar alcohol para emborracharme. También pude dejar el tabaco. ¿Irónico verdad? Si estos son cambios saludables y buenos ¿Entonces por qué encontré rechazo ante estas decisiones? Porque las personas no ven como ve Dios. Lo real y verdadero es Cristo. En Él está el camino correcto. El camino que tiene vida abundante y vida eterna. Un camino que reconcilia familias, que devuelve la vida a los perdidos, rescata a los adictos, da sentido a los que no quieren seguir viviendo. Estos son algunos ejemplos de lo que hace Cristo en nuestras vidas. Estoy seguro que tú podrás tener tus propias experiencias con Jesús. Insisto, ¡esto es real, esto es verdadero, esto es Cristo!

Al parecer, no todas las decisiones correctas son bien recibidas por la gente. Pablo lo advirtió hace varios cientos de años y hoy sigue siendo igual.
Pero no se trata solamente de comer o tomar algo, sino también de lo que festejas o a los eventos que acudes. En estos años he meditado sobre las celebraciones de Navidad y año Nuevo. Al principio era fácil decir que estaban mal. Después pensé en mis hijos. Serían rechazados y señalados. Probablemente me pedirían permiso para asistir a las posadas como todos sus amigos y yo tendría que decir que no. Incluso pienso que tal vez no estaría tan mal si les permitiría ir pero solo a que les dieran fruta o algún regalito, pero finalmente creo que este versículo trae luz a mi vida con respecto a las celebraciones que debemos y no debemos tener. Recibiremos críticas. Sí. Será difícil, también. ¿Lo podemos atravesar? Seguro, todo lo puedo en Cristo que me fortalece (Filipenses 4:13).

Ir contra corriente es algo natural cuando sigues a Jesús. No significa que debas hacer tonteras o cosas sin sentido. Lo que debes entender es que habrá gente que no apoye tus ganas de ser transformado por Cristo. Criticarán tus decisiones. Criticarán tus actos. Criticarán todo aquello que es diferente, que no entienden y que probablemente exhibe su error. Cristo es lo real y verdadero. No permitas que las críticas te desalienten o te frenen en tu carrera espiritual. Te invito a que busques a Dios y no dejes que nada ni nadie se oponga en tu relación con Él.

Oración:
Eterno Dios no permitas que las críticas me desanimen. Dame fortaleza y sabiduría para seguir tu camino con paso firme. Pon en mi el discernimiento correcto para comer, beber y celebrar las cosas correctas, las que son agradables a ti. No permitas que me separe de Ti, en el nombre de Jesús,
Amén.


¡Gracia y Paz!