lunes, 14 de octubre de 2013

¿DEBEN USAR VELO LAS MUJERES CRISTIANAS?



1 Corintios 11:3-16 trata el tema de las mujeres y los velos. El contexto del pasaje es la sumisión a la orden dada por Dios y al "escalafón de mando". El "velo" en la cabeza de una mujer es utilizado como una ilustración del orden, jefatura, y autoridad de Dios. El versículo clave de este pasaje es 1 Corintios 11:3, "Pero quiero que sepáis que Cristo es la cabeza de todo varón, y el varón es la cabeza de la mujer, y Dios la cabeza de Cristo". El resto del pasaje trata las implicaciones de esta verdad. El orden de autoridad es: Dios el Padre, Dios el Hijo, el hombre o el marido, y la mujer o la esposa. El velo o rebozo en la cabeza de una esposa creyente corintia mostraba que estaba bajo la autoridad de su marido, y por lo tanto en sumisión a Dios.

El versículo 10 es interesante: "Por lo cual la mujer debe tener señal de autoridad sobre su cabeza, por causa de los ángeles". ¿Por qué es importante para los ángeles que una mujer se cubra la cabeza? Sabemos que la relación de Dios con la humanidad es algo que los ángeles miran y aprenden de ella (1 Pedro 1:12). Por lo tanto, la sumisión de una mujer a la autoridad delegada de Dios es un ejemplo para los ángeles. Los santos ángeles, quienes son perfectamente sumisos a Dios, esperan que nosotros, como seguidores de Cristo, seamos iguales.

La cubierta mencionada en el versículo 13 podría ser una tela, pero también puede referirse a la longitud del cabello de una mujer, en base a los dos versículos siguientes: "La naturaleza misma ¿no os enseña que al varón le es deshonroso dejarse crecer el cabello? Por el contrario, a la mujer dejarse crecer el cabello le es honroso; porque en lugar de velo le es dado el cabello" (1 Corintios 11:14-15). En el contexto de este pasaje, una mujer que lleva el pelo largo se hace distinguir como mujer, y no hombre. El apóstol Pablo está diciendo que, en la cultura corintia, cuando el cabello de una esposa era más largo que el de su marido, demostraba su sumisión a su jefatura. Los papeles de varón y hembra están diseñados por Dios para representar una profunda lección espiritual, esto es, sumisión a la voluntad y al orden de Dios.

Pero ¿por qué era el cabello un problema en Corinto? La respuesta yace en la cultura de entonces. La ciudad de Corinto tenía un templo dedicado a Afrodita, la diosa del amor, y el lugar era notorio por la práctica de la prostitución ritual. Las mujeres que servían en el templo tenían las cabezas rapadas. En la cultura corintia, entonces, una cabeza rasurada señalaba a una mujer como prostituta del templo. Pablo le dice a la iglesia que una mujer que se haya cortado o rapado el cabello debe cubrirse (1 Corintios 11:6), una mujer que se hubiese cortado el cabello había perdido su "gloria," y no estaba bajo la protección de un marido. Un cabello corto sin velo enviaba el mensaje: "Rehúso someterme al orden de Dios." Por lo tanto, Pablo les está enseñando a los corintios que la longitud del cabello o el llevar "velo," en una mujer, era una indicación exterior de sumisión a Dios y a Su autoridad establecida. Esta era una manera en que la iglesia corintia se separaría de la corrupta cultura pagana que los rodeaba (2 Corintios 6:17).

Este pasaje no enseña que la mujer es inferior al hombre, o que debe someterse a todos los hombres. Enseña simplemente el orden de Dios y la jefatura espiritual en la relación del matrimonio. En la cultura corintia, una mujer que se cubría la cabeza durante la adoración o cuando estaba en público, demostraba su sumisión a la autoridad.

En la cultura actual ya no vemos a una mujer que usa velo como un signo de sumisión. En la mayoría de las sociedades modernas las bufandas y los sombreros son accesorios de moda, nada más. En la actualidad, una mujer todavía tiene la opción de usar velo si lo ve como un signo de su sumisión a la autoridad de su marido. Sin embargo, es una elección personal, y no una señal de espiritualidad. El verdadero asunto es la actitud de obediencia y sumisión del corazón a la autoridad "como al Señor" (Efesios 5:22). Dios está mucho más interesado en la actitud del corazón que en un velo.

“Gracia y Paz”

Fuente: “gotquestions”