martes, 11 de marzo de 2014

¿SABIAS QUE NO TODOS SOMOS HIJOS DE DIOS?



¿Sabias que no todos somos Hijos de Dios?

La Palabra de Dios nos dice que Él es el Creador del Universo y que todo lo hizo por la Palabra de su Poder. En tal sentido todo lo que existe es creación de Dios y toda la humanidad es creación de Dios. Pero no todos somos hijos de Dios. Dios hizo al hombre a su imagen y semejanza. (Leer Génesis 1:21-27).

La pregunta que cabe aquí es la siguiente ¿Quiénes son entonces los hijos de Dios?

Esta es una pregunta que no podemos responderla por medio de nuestro propio razonamiento, si no con lo que Dios mismo dice en Su Palabra. La Biblia nos habla claro al respecto y nos dice en:

Juan 1:11-13
“A lo suyo vino, y los suyos no le recibieron. Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios”.

Dios nos engendra espiritualmente cuando creemos en Jesús y confiamos en lo que hizo en la Cruz por nosotros.

El apóstol Pablo nos da evidencia de esta Gran Verdad. Léelo y verás las bendiciones que recaen sobre los que han sido por la Fe adoptados como hijos de Dios en:

Romanos 8:14-17
“Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios. Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: !!Abba, Padre! El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios. Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados”.

Gálatas 4:5-7
“para que redimiese a los que estaban bajo la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos. Y por cuanto sois hijos, Dios envió a vuestros corazones el Espíritu de su Hijo, el cual clama: !!Abba, Padre! Así que ya no eres esclavo, sino hijo; y si hijo, también heredero de Dios por medio de Cristo”.

Acepta a Jesucristo y conviértase en Hijo de Dios ¡ahora mismo!

“Gracia y Paz”
Editado por: Carlos Martínez M.
Cristo Vida

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LA BENDICIÓN SACERDOTAL



La bendición sacerdotal

Números 6:22-23
Jehová habló a Moisés, diciendo: Habla a Aarón y a sus hijos y diles: Así bendeciréis a los hijos de Israel, diciéndoles:

Números 6:24-26
“Jehová te bendiga, y te guarde;
Jehová haga resplandecer su rostro sobre ti, y tenga de ti misericordia;
Jehová alce sobre ti su rostro, y ponga en ti paz”.

Números 6:27
“Y pondrán mi nombre sobre los hijos de Israel, y yo los bendeciré”.

La Palabra de Dios nos instruye por medio de estos versículos sobre la Bendición Sacerdotal. Esta oración se hacia en los servicios ministeriales que realizaban los sacerdotes en el Antiguo Testamento. Ellos recibían el mandato solemne de bendecir al pueblo en el nombre de Jehová. Como lideres espirituales ellos imploraban que Dios bendijera sus vidas en una manera especial. El deseo de Dios era que el pueblo lograre experimentar su bendición y su favor sobre sus vidas. El pueblo de Dios comprendía que cuando el rostro de Dios resplandeciere sobre sus vidas, ¡ellos experimentarían sus bendiciones!

Debemos de ser sinceros y preguntarnos el día de hoy, ¿en verdad deseamos las Bendiciones de Dios? ¿Deseamos que esta oración sea una realidad en nuestras vidas?

El Salmo 80:3, nos dice: “Oh Dios, restáuranos; Haz resplandecer tu rostro, y seremos salvos”. ¡Dios nos ha prometido bendición, protección, favor, misericordia, paz y muchas otras bendiciones! No tenemos porque vivir sin esperanza o en un estado de frustración por las situaciones que nos están sucediendo.

Debemos orar el día de hoy porque todo lo se expresa en estos versículos se convierta realidad en nuestras vidas. Dios nos dice por medio de su Palabra que si lo buscamos él hará que su rostro resplandezca sobre nosotros. En Ezequiel 39:29, le dice a su pueblo: “ni esconderé más de ellos mi rostro; porque habré derramado de mi Espíritu sobre la casa de Israel, dice Jehová el Señor”.

Dios anhela resplandecer su rostro sobre ti, sobre mi, sobre todos sus hijos, pero es necesario que le busquemos y le adoremos en Espíritu y en verdad.

¡Hoy es un gran día para buscar su rostro!



“Gracia y Paz”

ORACIÓN


ORACIÓN:

Padre Santo, perdóname mi falta de capacidad, mi debilidad y mi falta de perseverancia en los proyectos que inicio y no termino. Por favor, ayúdame, dame determinación y fortaleza para ser constante en todas las cosas que hago. Te ruego me capacites para superar todas mis pruebas sabiendo que todo lo que tú permites en mi vida tiene siempre un buen propósito. Ayúdame en mi caminar espiritual a mantenerme firme para que yo pueda madurar como tú lo deseas. Te lo pido en nombre de Jesús, Amén.

¿Te hace falta paciencia y perseverancia?



¿Te hace falta paciencia y perseverancia?

Santiago 1:2-4
"Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia. Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna".

¿Has escuchado alguna vez la expresión "golpearse contra la pared?" ¿Suena doloroso, no es cierto? Esta expresión la usan algunas personas a veces para describir cómo se sienten cuando llegan al agotamiento poco después de haber iniciado una caminata o carrera por el parque. Los síntomas incluyen aceleramiento del ritmo del corazón, abundante sudoración, y una respiración agitada y dificultosa, mientras los pulmones se mantienen luchando por aire. Para estos nuevos "atletas" éste es el punto en el cual tienen que detenerse pues simplemente no pueden dar un paso más. Cuando experimentan estas sensaciones, muchas personas se rinden y abandonan su propósito de correr. ¡Increíble! Después de todo se supone que el ejercicio debía hacerles sentir bien, ¿no es así?

El problema es que estos nuevos atletas todavía no han alcanzado la resistencia física que los capacita para continuar creciendo en fortaleza y poder correr una mayor distancia cada día. Esta resistencia es el resultado de la constancia, la disciplina y la disposición a sufrir con el fin de obtener buenos resultados. Esto se aplica tanto al aspecto físico como a la vida espiritual. En ambos casos se requiere determinación para seguir adelante aun en medio de las dificultades que puedan aparecer.

Una pequeña historia nos ilustra este proceso. Dice que en una ocasión un niño estaba mirando como un gusano de seda, a punto de convertirse en una mariposa, luchaba por salir del capullo en donde se había desarrollado. Sintiendo compasión por el insecto, el niño decidió ayudarle terminando de romper el capullo y permitiendo que saliera al exterior. Sin embargo poco tiempo después la mariposa murió, pues al interrumpirse el proceso natural de la metamorfosis, sus alas no pudieron fortalecerse lo suficiente para permitirle volar y desarrollar su vida normalmente.

El pasaje de hoy nos muestra el progreso del vigor espiritual. En primer lugar nos afirma que en este mundo vamos a encontrar pruebas con toda seguridad. No dice “Si os halláis en pruebas”, sino “Cuando os halléis en diversas pruebas.” También nos enseña que, si mantenemos nuestra fe, las pruebas producen "paciencia", esto es resistencia. La paciencia, una vez adquirida, nos permite continuar hasta el final del proceso de santificación cuyo resultado es madurez espiritual o "perfección". Si cuando estamos en medio de una prueba, consideramos el resultado que Dios quiere ver en nosotros y ponemos en él nuestra confianza, aunque parezca imposible podemos sentir gozo aún en medio del dolor y la aflicción. Y los resultados serán de bendición para nuestras vidas, pues llegaremos a crecer espiritualmente al punto que seremos maduros y cabales, es decir, completos y sin que nos falte “cosa alguna”.

Si estás en medio de una prueba en estos momentos, concentra tu atención en tu Padre celestial. Piensa que él está totalmente conciente de lo que estás pasando. Él conoce tus dolores, tu incomodidad, las molestias que te afectan. Y le duelen tanto o más que a ti, pero, en su infinita sabiduría, él sabe también que es algo pasajero y que todo será para tu bien. Así lo dice Romanos 8:28: “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados”. Esta promesa es para aquellos que amamos al Señor, y le buscamos diariamente y obedecemos sus preceptos. Estos son “los que aman a Dios”, dice Jesús en Juan 14:21.

Confía en el Señor y pídele que te ayude a crear en ti las condiciones espirituales para resistir, sentir gozo y triunfar en medio de las pruebas. Lee la Biblia todos los días y pasa tiempo en oración buscando una comunión más íntima con Dios. Sin duda encontrarás obstáculos que te dificulten lograr este objetivo, pero mantente firme. Te sorprenderá cuando sientas la paz y la tranquilidad que llegará a tu vida.

ORACIÓN:
Padre Santo, perdóname mi falta de capacidad, mi debilidad y mi falta de perseverancia en los proyectos que inicio y no termino. Por favor, ayúdame, dame determinación y fortaleza para ser constante en todas las cosas que hago. Te ruego me capacites para superar todas mis pruebas sabiendo que todo lo que tú permites en mi vida tiene siempre un buen propósito. Ayúdame en mi caminar espiritual a mantenerme firme para que yo pueda madurar como tú lo deseas. Te lo pido en nombre de Jesús, Amén.


“Gracia y Paz”
Dios te Habla