–El que no ora, será vencido.
–El que no obedece las instrucciones y órdenes de Dios,
será vencido.
–El que le da más importancia a sus deseos y
satisfacciones personales que a las instrucciones y responsabilidades
encomendadas por Dios, será vencido.
–El diablo gradualmente te ira sacando del camino
correcto con ofrecimientos agradables, bonitos y deseables, con el propósito de
destruirte.
Después de algunos días de alegría pasajera, después de
algunos días de distracción pasajera, satanás te sacara los ojos (espirituales),
te quitara las fuerzas (espirituales) y serás la burla y la vergüenza, y tu
estado postrero será más terrible y vergonzoso.
Cuida con todo tu corazón las Bendiciones que Dios te ha
dado y no las cambies ni las vendas por un “plato de lentejas”.
Oremos y ayunemos porque Dios nos fortalezca en nuestras aéreas
débiles, porque por allí es donde se mete el diablo.
Elias Carmelo
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