martes, 27 de enero de 2015

NUNCA CALLES LA VERDAD DEL EVANGELIO


¡HOY PUEDES SALVAR UNA VIDA, PREDICA LA PALABRA DE DIOS!


Dios ama profundamente a las personas, y no quiere que por causa de sus pecados sufran una eternidad en el Infierno. Dios te ha llamado a ti para que hagas la diferencia, para que seas luz en medio de tanta oscuridad. Mejora tu relación con el Señor y prepárate para cumplir con la Gran Comisión que nos encomendó Jesucristo, la de salvar vidas.

Imagínate lo terrible que sería ver a tus familiares, amigos, o conocidos, siendo atormentados por toda la eternidad en el infierno. Deja tu zona de confort y predica las buenas nuevas de Salvación a cuantos sea posible, sin miedo, recordando que el Evangelio de Jesucristo es Poder de Dios.


¡Gracia y paz!

ORA y espera a que Dios ponga a la persona indicada delante de ti.


Enamorar, Enam(orar)
ORA y espera a que Dios ponga a la persona indicada delante de ti. 



¡NO SE PUEDE VIVIR HABLANDO DE DIOS, SI PRIMERO NO SE HABLA CON DIOS!


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¡MANTEN TU LAMPARA ENCENDIDA!


Dios da a Todos la oportunidad de salvarnos. El Dios Justo de la Biblia "Quiere que Todos los hombres sean salvos y vengan al conocimiento de la verdad" (1 Timoteo 2:4). Dios dice claramente que no quiere "que ninguno perezca, sino que TODOS procedan al arrepentimiento" (2 Pedro 3:9). Todos tenemos la oportunidad de elegir ser salvos o elegir rechazar esta salvación, porque Cristo "es la propiciación por nuestros pecados; y no solamente por los nuestros, sino también por los de TODO EL MUNDO" (1 Juan 2:2).


¡Gracia y Paz!
Carina Pirani‎

¿EXISTEN MATRIMONIOS COMPATIBLES?


“Se casaron. No eran compatibles según la noción moderna. Ninguno cruzo una carrera universitaria o fue a ninguna escuela. No tenían ahorros, ni a ningún familiar que le pudiese ayudar. Pero fueron uno de los matrimonios más compatibles espiritualmente de todos los tiempos. ¿Quiénes? Adán y Eva el matrimonio más perfecto que existió; porque eran tipo y sombra de Cristo y su iglesia.

¡Gracia y Paz!

Juan Córdova

¿TIENES CONFIANZA PLENA EN DIOS?


Probablemente cuando David escribió el Salmo 62 se encontraba huyendo, en medio de la rebelión de su hijo Absalón. Sin duda, mientras huía de aquellos que trataban de “aplastarle como pared desplomada y como cerca derribada”, el fugitivo rey sentía sobre él enormes presiones mentales, emocionales, físicas y espirituales, al punto que se sentía extenuado en todos los aspectos. Pero en medio de tan terrible situación, David, sostenido por su fe en el Dios todopoderoso, pudo decir que “solamente” en Dios podía encontrar paz y sosiego para su alma, y que “él solamente” era su roca y su salvación. A través de todo este Salmo, David repite la palabra “solamente”, como queriendo enfatizar en que no hay absolutamente nadie o nada más en quien podamos poner nuestra confianza. “Alma mía, en Dios solamente reposa”, “Él solamente es mi roca y mi salvación”.

Nadie queremos encontrarnos en una situación tan terrible como la que describe este Salmo, pero sin duda tendremos pruebas en nuestras vidas que nos harán sentir exhaustos en el aspecto físico, mental, emocional, así como también espiritualmente. Todo esto forma parte de la vida. Jesús lo advirtió claramente a sus discípulos al decirles: “En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo” (Juan 16:33). Debemos creer esta promesa de todo corazón y en nuestras pruebas y sufrimientos confiar que nuestro Padre no nos va a fallar. “Confiar en el Señor” es simplemente echarnos en sus brazos y permitirle que se haga cargo de nuestros problemas, de nuestras cargas, de nuestras preocupaciones. El mismo David nos da un consejo similar en el Salmo 55:22 donde dice: “Echa sobre Yahweh tu carga, y él te sustentará”. Cuando lo hacemos nuestra mente se aquieta, una gran paz llena nuestros corazones y sentimos nuevas fuerzas para continuar adelante. El Señor nos dice en el Salmo 46:10: “Estad quietos, y conoced que yo soy Dios”. Esencialmente, nuestro Padre celestial desea que dejemos de afanarnos tratando de resolverlo todo por nosotros mismos y que confiemos en él. Con esta seguridad, podemos reemplazar nuestros esfuerzos y afanes con el descanso y la confianza que él nos da.

Jesús nos invita a venir a él en busca de paz y descanso espiritual. En Mateo 11:28-30 nos dice: “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga”. Este es el sosiego del que nos habla la escritura de hoy, es un descanso profundo para nuestras almas que también nos beneficia el aspecto físico, mental y emocional, por difícil que sea la situación en que nos encontremos. Pero para ello es necesario que confiemos en el Señor y que llevemos su yugo, que nos unamos a él y nos dejemos dirigir por él. Entonces él nos llevará hacia la victoria por el camino que él ya conoce. Él nos dio el ejemplo perfecto estando en Getsemaní, en medio de su agonía a pocas horas de su muerte. Allí se postró en oración y pidió al Padre tres veces que hiciera su voluntad. Entonces pudo sentir paz y gozo y recibió la fortaleza que necesitaba para seguir adelante con la encomienda que el Padre le había dado.

Si estás en medio de una prueba, medita en todas las promesas que Dios nos da. Piensa que Dios está en control y confía en él de todo corazón. Aplica la experiencia de David en tu vida. No olvides que él confió “solamente” en Dios, y recibió paz y sosiego para su alma en medio de la prueba. Y finalmente Dios le dio la victoria sobre todos los que se habían levantado contra él (2 Samuel 18:31).

Oración:
Eterno Padre, te ruego me ayudes a confiar totalmente en ti y solamente en ti en medio de esta prueba que estoy viviendo y que me ahoga. Por favor, dame la paz y el descanso espiritual que necesito. En el nombre de Jesús, Amén.

¡Gracia y Paz!

Dios te Habla

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