Salmos 24:1
“De Jehová es la tierra y su
plenitud; El mundo, y los que en él habitan”.
A veces vivimos de una manera que
pareciera que creemos que el mundo fue creado para nuestro placer, para
divertirnos y cumplir cualquier deseo que se nos venga a la mente. Esto es todo
un error. El resultado de esta actitud es la miseria, el sufrimiento, y los
dolores que experimentamos diariamente y de que los periódicos y los noticieros
son testigos constantes. Nos equivocamos. De Jehová es la tierra y su plenitud.
La Biblia dice
de Jesús: “Todas las cosas por Él fueron hechas, y sin el nada de lo que ha
sido hecho, fue hecho” (Juan 1:3). También dice: “ Señor, digno eres de recibir
la gloria y la honra y el poder; tu creaste todas las cosas, y por tu voluntad
existen y fueron creadas” (Apocalipsis 4:11).
Si no honras ni sirves a Él, te
equivocas del propósito de esta vida, y esto resultará en una eternidad de
remordimiento y angustia. Jesús dice en Apocalipsis 3:20: “He aquí, yo estoy a
la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él, y
cenaré con él, y el conmigo”. ¿No le vas a abrir la puerta? La Biblia dice en Filipenses
2:10, 11: “para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que
están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua
confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre”.
“Gracia y Paz”
Un Versículo de la Biblia cada Día
