martes, 16 de febrero de 2016

CARACTERÍSTICAS DE LOS FALSOS MAESTROS




Mateo 7:15
“Cuídense de los falsos profetas, que vienen a ustedes con vestidos de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces”.

Nuestro redentor y salvador Jesucristo dijo que los verdaderos creyentes se conocerían por sus frutos. Un falso maestro puede aparentar tener fruto de cristiano pero tarde o temprano se descubrirá lo que verdaderamente es. Una fuente no puede dar agua dulce y salada a la misma vez. Los verdaderos siervos de Dios siempre darán un fruto espiritual, los falsos maestros aparentan dar buenos frutos pero no podrán esconder sus frutos de pecado y engaño. Solo escudriñando la Biblia podremos detectar a estos farsantes.

Aquí presentamos algunas características que distinguen a los falsos maestros. Algunos presentaran todas las características y otros, quizás, solo alguna de ellas pero de cualquier manera eso no significa que NO sea UN FALSO MAESTRO:


Apariencia de gran espiritualidad y sabiduría divina.

Esta característica es una de las más sutiles utilizadas por estos perversos engañadores. Los creyentes inmaduros siempre son impactados con la espiritualidad de estos líderes y les llama mucho la atención que ellos aparentan tener una relación con Dios que nadie más puede tener. (2 Timoteo 3:1-2; 5).


FALTA DE TEMOR Y SUMISIÓN A LA PALABRA.

La forma más directa para descubrir un falso maestro es su reacción al ser enfrentado a la Palabra de Dios. El falso maestro no respeta lo que la Biblia dice y la tuerce para poder acomodarla a su doctrina. Estos acostumbran tomar versos fuera de su contexto bíblico para establecer sus tradiciones de hombres. No están dispuestos a escudriñar la Escritura porque para ellos su opinión es más importante que la Biblia. (1 Timoteo 4:2-4; 2 Pedro 3:14-16).

En la Biblia no hay versos en un vació. Un versículo de la Palabra no puede ser utilizado para hacer a otro verso nulo y sin valor o para contradecir una enseñanza clara de la Escritura. Cuando se hace esto, se le falta el respeto a la Palabra de Dios. Un buen maestro armoniza todos los versos de la Palabra sobre un tema bíblico para llegar a una conclusión doctrinal sana y verdadera. Cuando la Biblia dice algo, el verdadero hombre de Dios no lucha con ella, simplemente lo acepta, se rinde ante la Palabra. (2 Pedro 1:20-21).


FALTA DE TEMOR A DIOS Y LAS POTESTADES SUPERIORES.

Los falsos maestros son muy rápidos para decir "El Señor me dijo…" o "Dios me dijo…" o "Dios me reveló…". Estos demonios vestidos de cristianos toman el nombre de Dios en vano y hasta dicen recibir revelación directa de Dios mismo. Aunque sus profecías no se cumplan ni estén de acuerdo con la Palabra de Dios, estos no cambian ni su rumbo ni su comportamiento, y continúan hablando de esta manera porque tienen su conciencia cauterizada. Dios siempre ha establecido claramente que el hombre que habla en nombre de Dios y lo que él tal habla no se cumple es un mentiroso y un farsante. De acuerdo a la ley de Moisés tal hombre debía morir al instante. (Deuteronomio 18:20).


USO DE PALABRERÍAS IMPRESIONANTES.

Las palabras de Pablo para Timoteo fueron claras y directas. Ordena que Timoteo requiera a algunos que no enseñen doctrinas diferentes y que no presten atención a fábulas y genealogías interminables (palabrerías impresionantes). Cuando los creyentes se desvían de la verdad y la simplicidad del evangelio, terminan desechando la fe y se apartan de su inicial profesión. Estos siguen a estos falsos maestros que según la Biblia quieren hacerse doctores de la Palabra y ni siquiera entienden ni lo que hablan ni lo que afirman. (1 Timoteo 1:3-7).


FALTA DE RESPETO AL EVANGELIO.

Buscan prosélitos. A los falsos maestros no les interesa ganar almas para el reino de los cielos, su mayor interés es el de sacar a los miembros de otras iglesias para que sigan sus pasos de error. Para ellos el tener como seguidores a los que fueron miembros de otras iglesias, es un gran orgullo. Solo desean un grupo que les siga y por eso inventan nuevas doctrinas e interpretaciones, siendo dirigidos por el mismo diablo. Estos son los que pescan en peceras no en el mar. Además, estos farsantes tienen como única meta llenar su bolsillo, ¡“Venden el Evangelio y hasta los clavos de la cruz”!. (Mateo 10:8; 2 Pedro 2:3).


EGOLATRÍA Y CONTROL.

El foco de atención de estos falsos maestros no es Cristo, sino ellos mismos. Buscan alabarse y endiosarse, adorarse ellos mismos como el centro de importancia. A menudo usan frases como "Yo hice", "Yo fui", "Yo reprendí", Yo sane", "Yo profetice", etc. Estos siempre están buscando una oportunidad para ensalzar su nombre y su persona. Ellos son sus propios dioses, solo buscan la codicia y hablan arrogantemente llenos de vanidad. (2 Pedro 2:14, 18).

El hecho de que algunos falsos maestros prohíban a sus seguidores casarse, y que los manden a que se abstengan de ciertos alimentos es indicio de "control" y "opresión". El evangelio de Jesucristo no es un evangelio de opresión, control, o esclavitud. El verdadero evangelio es libertad. Los falsos maestros son muy hábiles en manejar a sus seguidores para mantenerlos intimidados.

Estos farsantes dicen que ellos son los únicos poseedores de la verdad. Que ellos son los únicos verdaderos maestros, apóstoles o profetas. Algunos amenazan a sus seguidores de que perderán su salvación si no son parte de sus grupos y organizaciones; les prohíben tajantemente leer o escuchar material que no sea de su organización o que enseñe en contra de esta; también prohíben la relación y amistad con aquellos que no son de su grupo, o mejor dicho, de su secta. Les prometen libertad a sus seguidores pero en realidad lo que dan es esclavitud. (Judas 2:19).

Otra de las características de los falsos maestros es que se concentran más en las “experiencias” y los “milagros” que en la verdad de la Palabra. Estos son de aquellos que aparentan estar basados en la Biblia pero solo buscan mover las emociones y los sentimientos de sus seguidores para que no presten atención a la Palabra de Dios. Es cierto que el evangelio de Cristo produce grandes experiencias y bendiciones y se efectúan grandes milagros, pero solamente dentro del contexto de la Palabra. Estos hombres hacen énfasis en lo carnal y material, no en lo espiritual.

Predican un evangelio fácil, de grande prosperidad y de esta manera cautivan las mentes de los indoctos con promesas de grandes soluciones a sus problemas.

De acuerdo a la Biblia, las experiencias del creyente son a veces más dolorosas que agradables. El verdadero evangelio nos habla de bendiciones, pero también de persecuciones y problemas. El verdadero creyente vive una lucha espiritual constante contra las acechanzas del enemigo.


EL FINAL DE ESTOS FALSOS MAESTROS, PROFETAS, APÓSTOLES Y MINISTROS NO ES NADA A DESEARSE.

La Biblia habla claramente acerca de su destino y es triste que sus seguidores también tengan igual fin. Los falsos maestros no se preocupan por estas advertencias porque según ellos, están en lo correcto y no temen perecer. (1 Juan 2:18-19; 2 Pedro 2:12-13, 17; Judas 11-16).

Tengamos mucho cuidado de no estar o caer en una congregación donde estén este tipo de falsos maestros, tengamos presente que Cristo dijo que éstos tratarían de engañar "si fuera posible aún a los escogidos”. Sin embargo un escogido no puede ser engañado. El escogido escudriña la Biblia como aquellos de Berea (Hechos 17:11) para ver si las enseñanzas son así. El escogido no cree en hombres, cree a la Palabra de Dios.


¡Gracia y Paz!
Aprendiendo la Sana Doctrina

Jorge L. Trujillo

¡CREER EN DIOS ES LO CORRECTO, PERO NO ES SUFICIENTE!


TU PODRÁS DESILUSIONARTE DE IGLESIAS Y CRISTIANOS, PERO NUNCA DE DIOS...


Jeremías 17:5
“Así dice el SEÑOR: Maldito el hombre que en el hombre confía, y hace de la carne su fortaleza, y del SEÑOR se aparta su corazón”.

Sofonías 2:3
“Busquen al SEÑOR, Todos ustedes, humildes de la tierra Que han cumplido Sus preceptos; Busquen la justicia, busquen la humildad. Quizá serán protegidos El día de la ira del SEÑOR”.

Isaías 55:6
“Busquen al SEÑOR mientras puede ser hallado, Llámenlo en tanto que está cerca”.

Deuteronomio 4:29
“Pero desde allí buscarás al SEÑOR tu Dios, y lo hallarás si lo buscas con todo tu corazón y con toda tu alma”.


¿QUE CARACTERÍSTICAS TIENE LA SANA DOCTRINA?




Lo que a continuación les comparto no es lo que yo creo que debe de ser la Sana Doctrina, sino lo que la propia Palabra de Dios nos dice que debe de ser:

1.- ES CONFORME A LA PIEDAD:

1 Timoteo 6:3-4
"Si alguno enseña otra cosa, y no se conforma a las sanas palabras de nuestro Señor Jesucristo, y a la doctrina que es conforme a la piedad, está envanecido, nada sabe, y delira acerca de cuestiones y contiendas de palabras, blasfemias, malas sospechas, disputas necias de hombres corruptos de entendimiento y privados de la verdad, que toman la piedad como fuente de ganancia; apártate de los tales".

2.- ES SANA:

Tito 2:1
"Pero tú habla lo que está de acuerdo con la sana doctrina"

3.- ES PURA:

Tito 2:7-8
"…preséntate tú en todo como ejemplo de buenas obras; en la enseñanza mostrando integridad, seriedad, palabra sana e irreprochable, de modo que el adversario se avergüence y no tenga nada malo que decir de vosotros".

Cuando no se sigue o no se tiene una base doctrinal sana se corre el peligro de dar lugar a espíritus engañadores, doctrinas de demonios y vientos de doctrinas que conducen a la perdición (léase también Efesios 4:14).

4.- SE BASA EN LA BIBLIA:
La base de toda enseñanza o predicación debe ser La Biblia y únicamente La Biblia, porque está escrito: "Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, equipado para toda buena obra" (2 Timoteo 3:16-17).

Por eso es verdaderamente lamentable que en muchos púlpitos se cambié La Biblia por humanismo, psicología, doctrinas paganas de hombres, etc.

No es correcto fundamentar las enseñanzas o prédica en experiencias personales, alabanzas, sueños, etc., porque La Biblia contiene el mensaje que Dios quiere trasladar a su pueblo, porque "Todo lo que fue escrito en tiempos pasados, para nuestra enseñanza se escribió, a fin de que por medio de la paciencia y del consuelo de las Escrituras tengamos esperanza" (Romanos 15:4).

Constantemente vemos en La Biblia que la predicación y la enseñanza que provienen del Señor tienen su cimiento en La Biblia (Hechos 13:49; 15:35; 16:32; 19:10; 1 Pedro 1:25).

5.- DEBE SER CON DOCTRINA:

La Biblia dice: "el que enseña, en doctrina", mostrándonos que toda enseñanza debe coincidir con lo escrito en La Biblia y concordar con la doctrina expuesta por los apóstoles"; es decir que, el ministro o maestro no debe trasladar enseñanzas que contradigan el contexto bíblico y lo expuesto por su autoridad, por muy inspirador o hermoso que se escuche (1 Timoteo 6:3-4), porque se da lugar a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios.

1 Timoteo 4:1
"Pero el Espíritu dice claramente que en los postreros tiempos algunos apostatarán de la fe, escuchando a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios…".

6.- DEBE SER PARA ENSEÑAR:

La Biblia en Romanos 12:6-8 traduce "el que enseña, úselo en la enseñanza"; es decir que las personas con el conocimiento de La Palabra de Dios, no deben utilizarlo para engrandecerse a sí mismas, ni para hacer sentir mal a los que escuchan y no saben, ni tampoco para rivalizar con otras personas para ver quien sabe más; sino que se debe enseñar para que el Pueblo de Dios sea edificado y conozca más al Señor y su Palabra.

Se puede enseñar con doctrina, discurso ordenado, didáctica y más, pero si se carece del don de enseñanza, no se obtendrán los resultados que Dios desea, porque la enseñanza será solamente un traslado de conocimiento; sin embargo, si al enseñar tenemos doctrina, discurso ordenado, didáctica y el don de enseñanza, entonces sí estamos siendo vasos útiles en las manos de Dios y estamos educando, por La Palabra, la nueva vida de los que oyentes y esa enseñanza influenciará permanentemente su conducta, para transformarlos cada vez más a la imagen de nuestro Señor Jesucristo.

En el libro de los Hechos 18:24-26 leemos: "Llegó entonces a Efeso un judío que se llamaba Apolos, natural de Alejandría, varón elocuente, poderoso en Las Escrituras. Este había sido instruido en el camino del Señor, y siendo de espíritu fervoroso, hablaba y enseñaba diligentemente lo concerniente a Señor, aunque solamente conocía el bautismo de Juan. Y comenzó a hablar con denuedo en la sinagoga; pero cuando lo oyeron Priscila y Aquila, le tomaron aparte y le expusieron más exactamente el camino de Dios".

En este caso vemos el ejemplo del cristiano que enseña sin tener el don de enseñanza. Apolos es el ejemplo del cristiano que tiene doctrina, discurso ordenado, didáctica, etc., pero no tiene el don de enseñanza porque no tenía el bautismo con el Espíritu Santo, pero Priscila y Aquila, representan a los cristianos que tienen doctrina, discurso ordenado, didáctica y el don de enseñanza, y por ello le enseñan el camino de Dios con mayor exactitud.

7.- DEBE SER EXPLICADA Y ACLARADA:
Cuando enseñamos la Palabra de Dios debemos explicar y darle el sentido bíblico de lo que significa el pasaje que exponemos. Esta necesidad es evidente cuando se enseña a diferentes grupos de personas, porque no se puede enseñar de la misma forma a niños que a jóvenes, adultos o ancianos, y aún es diferente enseñarle a los mismos grupos de personas de diferentes culturas.

A los niños hay que enseñarles con juegos, dibujos, juguetes, etc., a los adolescentes se les debe enseñar de manera que la exposición les sea atractiva y que los rete a entregar su juventud al Señor. Los adultos por su experiencia en la vida y su madurez, no tienen las mismas necesidades que los jóvenes, y la forma de enseñar a los ancianos es diferente porque tienen necesidades diferentes.

En Lucas 24 leemos cómo el Señor Jesús les abrió el entendimiento a sus discípulos para que comprendieran las Escrituras (Lucas. 24:44 al 45).

8.- DEBE SER CONSTANTE:

En Nehemías 8:18 se lee que Esdras leía día tras día el libro de La Ley de Dios. Esto indica que la enseñanza debe ser un proceso constante en las congregaciones; un fácil ejemplo lo vemos en las escuelas, donde el alumno debe asistir diariamente, cierta cantidad de horas para ser enseñado. Por esta razón hay Iglesias donde existe el departamento de Discipulado, que enseña y delega a personas para transmitir la enseñanza en los hogares.

9.- NO PONER CARGAS SOBRE LOS OYENTES:

En los versos nueve al doce se lee que Nehemías, Esdras y los levitas que enseñaban decían a todo el pueblo: "no os entristezcáis, ni lloréis; porque todo el pueblo lloraba oyendo las palabras de la ley. Y les dijo: Id, comed grosuras, y bebed vino dulce, y enviad porciones a los que no tienen aparejado; porque día santo es a nuestro Señor; y no os entristezcáis, porque el gozo del Señor es vuestra fortaleza". Esto muestra que la persona que enseña no debe poner cargas sobre el pueblo.

En Lucas 11:45 al 46 leemos: "Y respondiendo uno de los doctores de la ley, le dice: Maestro, cuando dices esto, también nos afrentas á nosotros. Y él dijo: ¡Ay de vosotros también, doctores de la ley! Que cargáis á los hombres con cargas que no pueden llevar; mas vosotros ni aun con un dedo tocáis las cargas". Aquí, el Señor confrontó a los escribas porque con la interpretación y enseñanza que daban, ponían cargas sobre el pueblo que ellos no se atrevían a mover con un dedo.

10.- LA INVOCACIÓN A DIOS:

En Nehemías 9:4, leemos que los levitas: "Se levantaron luego sobre la grada de los levitas, Jesúa y Bani, Cadmiel, Sebanías, Buni, Serebías, Bani y Quenani, y clamaron en voz alta al Señor su Dio". Esto nos muestra la necesidad de depender de Dios para obtener el alimento celestial, al estudiar La Palabra. La dependencia de Dios es una garantía para el expositor y los oyentes, porque hará que el expositor busque, clame y llore delante de Dios para pedir el alimento espiritual. Un ejemplo de esto lo vemos en Éxodo 16:15 "Y viéndolo los hijos de Israel, se dijeron unos a otros: ¿Qué es esto? Porque no sabían qué era. Entonces Moisés les dijo: es el pan que Jehová os da para comer", porque los israelitas debían salir diariamente a recoger su alimento, el mana, figura de la Palabra de Dios.

En esta ocasión solo hemos visto algunas características de la Sana Doctrina, ya que este tema abarca también muchas técnicas y métodos que son muy importantes para la edificación de quienes estamos aprendiendo la Palabra de Dios. Por ello animo a quienes enseñan a que lo hagan transmitiendo el evangelio y la doctrina de Jesucristo en su pureza bíblica, con su corazón y su vida en ella.

“Gracia y Paz”

Aprendiendo la Sana Doctrina