Padre santo, te doy gracias por
tu infinita misericordia y por tu amor que sobrepasa todo conocimiento. Hoy me humillo
ante tu trono de gracia arrepentido por todas mis fallas. Por mi indiferencia
ante las necesidades de los demás. Por la insensibilidad ante los que me aman. Te
ruego me perdones y me limpies de toda maldad y te ruego cambies mi corazón de
piedra por uno conforme al tuyo Señor. Ayúdame a rechazar todo sentimiento de
culpabilidad, y hazme sentir la paz y el gozo de tu amor y tu perdón en mi
vida. En el nombre de Jesús, Amén.
“Gracia y Paz”
No hay comentarios:
Publicar un comentario