Aprendiendo la Sana Doctrina

Cómo manejar las relaciones negativas

1 Corintios 15:33-34

“No erréis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres. Velad debidamente, y no pequéis; porque algunos no conocen a Dios; para vergüenza vuestra lo digo”.

En un mundo ideal, todas nuestras relaciones deberían acercarnos más al Señor. Sin embargo, debido al pecado, no es así. Dios quiere que ejerzamos influencia en aquellos que no están andando en obediencia a Él, pero si no tenemos cuidado podemos fácilmente terminar siguiéndolos a ellos. ¿Cómo debemos lidiar con las relaciones que nos perjudican, en vez de edificarnos?

Oración: El primer paso es orar por las personas que tiendan a alejarle del Señor. No es tarea suya cambiarlas, pero puede pedirle a Dios que obre en sus vidas. Y no olvide pedirle que le dé la sabiduría y la paciencia que necesita en sus relaciones con ellas.

Separación: Es posible que tenga que romper con una relación si ella está obstaculizando su andar con el Señor. Sin embargo, esto debe hacerse solo después de mucha oración y de sabios consejos. Recuerde que algunas relaciones están destinadas a ser permanentes, por lo que debe escuchar cuidadosamente lo que Dios le esté diciendo.

Perseverancia: Si la relación negativa nunca cambia, y el Señor no le está llamando a romper la relación con esa persona, entonces Él quiere que usted persevere en la situación. Su objetivo es caminar fielmente con su Padre celestial a pesar de cualquier obstáculo u oposición.

Si usted mantiene relaciones negativas, cultive buenas relaciones con personas que puedan ayudarle a crecer en su fe. Dedique tiempo a la Palabra de Dios, llenando su mente con verdades que anclen su alma en situaciones tormentosas, y pueda en el futuro influenciar positivamente a otras personas.

“Gracia y Paz”

Meditación Diaria