Salmo 138:8
“El Señor cumplirá su propósito
en mí; Tu misericordia, oh Señor, es para siempre; No desampares la obra de tus
manos”
Todos sueños y
planes a futuro, y si queremos verlos realizados es necesario esforzarse y
trabajar duro hasta verlos cumplidos; pero no sólo se trata de un esfuerzo
físico sino también de entregar a Dios estos sueños.
¿Has incluido a Dios en tus
planes? Solamente Él sabe qué es lo mejor para ti, cuando planifiques algo
habla con Dios a cerca de ello y ten por seguro que te irá bien, porque sus
pensamientos son más altos que los nuestros.
¡Gracia y Paz!
Ruth Mamani