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martes, 29 de enero de 2013
LOS BENEFICIOS DE LOS ALIMENTOS DE COLOR BLANCO
Los médicos siempre suelen decir
que cuanto más colorido nuestro plato, más nutrientes para nuestra salud. Todo
el mundo conoce los beneficios de alimentos rojos, morados o naranjas, pero casi
nadie sabe las ventajas de los discretos alimentos blancos, como la coliflor o
manzana.
Los alimentos pálidos o blancos,
sean los legumbres, vegetales o la pulpa de las frutas, cuentan con propiedades
capaces de reducir el desarrollo de enfermedades cardíacas e incluso evitar el
accidente cerebrovascular, el ACV. Estos beneficios y muchos otros más se debe
a la presencia de sustancias como la flavina, que da el color blanquecino y
ofrecen muchos nutrientes.
Dichas sustancias favorecen la
renovación celular y ayudan a controlar los niveles de glucosa y triglicéridos
en la sangre, previniendo enfermedades vasculares. También encontramos calcio,
que baja la presión arterial, además de potasio, fósforo y magnesio que regulan
el trabajo del corazón.
La manzana, por ejemplo, reduce
los niveles de colesterol y mejora el sistema inmunológico. La coliflor ayuda a
bajar la presión arterial y cuenta con buenos índices de fibra. La pera tiene
efecto diurético y fibras que auxilian la digestión.
Las endivias reducen el colesterol
y elimina los excesos de radicales libres. La fruta del conde también es rica
en antioxidantes y ofrece energía extra al organismo. La cebolla consumida
cruda, reduce la presión arterial y tiene acción antiinflamatoria.
No te olvides que el color rojo
de los alimentos reduce el colesterol, previene el cáncer de próstata y mama.
El color naranja combate el cáncer y fortalece las defensas y el morado
controla las infecciones, obesidad.
SIEMPRE CONSULTA A TU MEDICO,
para que mantengas tu cuerpo sano.
“¿o ignoráis que vuestro cuerpo
es templo del Espíritu Santo, el cual está en vosotros, el cual tenéis de Dios,
y que no sois vuestros?” (1 corintios 6:19).
“…dijo Dios: Produzca la tierra
hierba verde, hierba que dé semilla; árbol de fruto que dé fruto según su
género, que su semilla esté en él, sobre
la tierra. Y fue así. Produjo, pues, la tierra hierba verde, hierba que da
semilla según su naturaleza, y árbol que
da fruto, cuya semilla está en él, según su género. Y vio Dios que era bueno”
(Génesis 1:11-12).
“Y dijo Dios: He aquí que os he
dado toda planta que da semilla, que está sobre toda la tierra, y todo árbol en
que hay fruto y que da semilla; os serán para comer” (Génesis 1:29).
“He aquí Yo les traeré sanidad y
medicina; y los curaré y les revelaré abundancia de paz y de verdad” (Jeremías
33:6),
“Gracia y Paz”
Fuente: Nutrición.pro
SER RESPONSABLE
Romanos 14:12
“Cada uno de nosotros dará a Dios
cuenta de sí”.
Gálatas 6:7
“No os engañéis; Dios no puede
ser burlado: pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará”.
La palabra «responsable» viene
del latín «responderé». Entonces, «ser responsable» significa: «hacerse cargo,
asumir las consecuencias de sus actos». Una persona responsable reconoce la
obligación de cumplir con sus compromisos y, eventualmente, reparar los errores
que haya cometido. Ella «asume», como decimos hoy en día.
La responsabilidad está ligada a
la libertad y a la dignidad humanas. Los hombres han sido creados libres y
conscientes de lo que hacen. Una de las paradojas de nuestra sociedad es que a
menudo reivindicamos en voz alta y con fuerza nuestra libertad, y al mismo
tiempo adoptamos actitudes cada vez más irresponsables.
Somos responsables ante nuestros
allegados y ante la sociedad, pero primeramente lo somos ante el Autor de
nuestra vida, Dios mismo. Cada uno de nosotros dará cuentas a Dios por todo lo
que haya hecho en su vida, y especialmente por su actitud respecto a Jesús y a
la obra que cumplió en la cruz.
Dios lo envió para que fuese
nuestro Salvador. Jesús aceptó el juicio divino contra nuestros pecados. Tomó
la responsabilidad que nosotros no podíamos asumir. Ahora todos somos
responsables de aceptarlo como Salvador y Señor. Entonces, al creer en él,
apoyándonos en su gracia, podemos asumir nuestras responsabilidades en todos
los ámbitos.
“Gracia y paz”
SIN SANTIDAD NADIE VERÁ AL SEÑOR
Mateo 28:19-20
“Id por todo el mundo y predicad
el Evangelio a toda criatura.” Marcos 16:15. También nuestro Señor dijo: “Id y
haced discípulos (doctrinad)…Enseñándoles que guarden todas las cosas que os he
mandado…”
El Señor ordena a predicar y adoctrinar,
son dos cosas fundamentalísimas, que se complementan la una con la otra.
Predicar sin doctrinar, es sembrar sin poder cosechar; doctrinar sin predicar
es querer cosechar sin sembrar. Dios ha puesto sobre nosotros una carga muy
grande por las almas que nunca han escuchado el Evangelio, pero también nos ha
cargado, por las almas que continuamente escuchan el Evangelio.
Es muy doloroso que las almas se
pierdan, sin nunca haber escuchado el Evangelio. Pero es mucho más doloroso que
las almas se pierdan escuchando todos los días el Evangelio. Es muy triste
perder el alma en la selva, pero es mucho más triste perder el alma en la Iglesia. Es mejor ser
un pagano en la selva, que ser un mundano en la Iglesia. Es terrible
ser frío y perderse en la selva, pero es mucho más terrible ser tibio y
perderse en la Iglesia.
De ahí la responsabilidad de la Iglesia de no solamente
predicar y evangelizar, sino también de adoctrinar y enseñar. Nosotros siempre
hemos hecho ambas cosas, por eso este mensaje en esta ocasión trata sobre LA SANTIDAD.
El significado primario de la
palabra santidad es separación o dedicación para vivir para Dios y para
servirle. Si la demanda divina de santidad o separación incluye la casa templo,
el mobiliario, los utensilios, todo lo utilizado en rendir culto a Dios tiene
que ser separado exclusivamente para Dios, mucho más se refiere a nosotros como
hijos de Dios, todo nuestro ser: espíritu, alma y cuerpo.
“Seguid… la santidad, sin la cual
nadie verá al Señor” (Hebreos 12:14).
En Lucas 1:75 dice que este
Evangelio es “en santidad y en justicia”.
En 1 Pedro 1:15-16, dice: “Como
aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra manera
de vivir; porque escrito está: Sed santos, porque yo soy santo”.
En 2 Corintios 7:1, dice:
“Limpiémonos de toda contaminación de carne y de espíritu, perfeccionando la
santidad en el temor de Dios”.
En Efesios 4:24 se nos ordena
diciendo: “Vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y
santidad de la verdad”.
En Tito 2:12, nos dice:
“Enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos
en este siglo sobria, justa y piadosamente”.
El Salmo 24:3 y 4, dice: “¿Quién
subirá al monte de Jehová? ¿Y quién estará en su lugar santo? El limpio de
manos y puro de corazón; el que no ha elevado su alma a cosas vanas, ni jurado
con engaño”.
En Mateo 5:8, dice:
“Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios”.
En 1 Juan 2:15-17, dice: “No
améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el
amor del Padre no está en él. Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de
la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del
Padre, sino del mundo. Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la
voluntad de Dios permanece para siempre”.
En 1 Timoteo 2:8-10 dice:
“Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar, levantando manos santas, sin
ira ni contienda. Asimismo que las mujeres se atavíen de ropa decorosa, con
pudor y modestia; no con peinado ostentoso, ni oro, ni perlas, ni vestidos
costosos, sino con buenas obras, como corresponde a mujeres que profesan piedad”.
1 Pedro 3:5: “Porque así también
se ataviaban en otro tiempo aquellas santas mujeres que esperaban en Dios”.
Hoy día hay mucha gente en las
iglesias que dicen ser salvos, pero viven, actúan y visten como lo hace el
mundo. Dicen ser cristianos pero viven y visten como mundanos y hasta como
paganos. A los tales les preocupa más estar a la moda, que estar en santidad.
No siguen los dictados de la
Biblia , sino los dictados de Hollywood y de París. No se
puede establecer la diferencia entre los tales y los inconversos y paganos. No
solo se contaminan ellos mismos, sino que también contaminan la casa de Dios
pues asisten a la misma, vestidos indecorosamente. Refiriéndose a la casa de
Dios dice el Salmo 93:5, como sigue: “La santidad conviene a tu casa, oh
Jehová, por los siglos y para siempre”.
Muchos dicen que Dios no se fija
en lo exterior, pero estas citas bíblicas que hemos leído se refieren o
incluyen lo exterior. Muchos dicen que Dios lo que mira es lo interior, pero al
mirar lo interior, ya ha tenido que mirar lo exterior.
La santidad tiene precisamente
dos aspectos: El interno y el externo; esto es, el aspecto del corazón y el
aspecto de la conducta exterior. Uno tiene que ver con los motivos, el otro con
las acciones. La santidad interna es un estado de pureza obrado por el Espíritu
de Dios. La santidad externa es una vida de justicia y devoción a los más
elevados ideales del Evangelio. La verdadera santidad interna siempre se
manifestará externamente, manteniendo normas altas de conducta conforme a la Palabra de Dios, y por
consiguiente diferentes a las del mundo. El creyente santificado, será
diferente tanto interior como exteriormente.
Dios nos ha llamado a pureza y a
santidad. Dice en 1 Tesalonicenses 4:7 “Pues no nos ha llamado Dios a
inmundicia, sino a santificación”.
Nosotros tenemos que seguir el
llamado de Dios, los dictados de la
Biblia , y no el llamado del mundo y los dictados de modas
indecorosas. El camino al cielo, es camino de santidad. En Isaías 35:8 dice: “Y
habrá allí calzada y camino, y será llamado Camino de Santidad; no pasará
inmundo por él...” Dios es santo y el camino que conduce a Él, es Camino de
Santidad, PORQUE SIN SANTIDAD NADIE VERÁ AL SEÑOR.
Causa dolor ver la condición de
tantos creyentes, iglesias y denominaciones llenos del mundo; completamente
mundanos, viviendo, actuando, hablando, vistiendo como el mundo, amando al
mundo y las cosas del mundo; ellos reclaman que son cristianos, reclaman que
irán al cielo, piensan que Dios no interviene en lo exterior, pero leamos la
severa amonestación del apóstol Santiago que dijo: “¡Oh almas adúlteras! ¿No
sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que
quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios” (Santiago 4:4).
Causa mucho dolor, que aflige el
corazón y muchos naufragan en la fe, cuando ven a notorios predicadores, que
son adúlteros, fornicarios, o divorciándose y recasandose repetidas veces con
una facilidad espantosa. O engañadores, cuyo dios es el vientre, aprovechándose
de la buena fe de los creyentes.
Una razón por la cual el mundo no
ha sido evangelizado, es precisamente por los malos testimonios, la
mundanalidad, y la falta de santidad en individuos e iglesias. Con razón el
apóstol Pedro afirma: “Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio,
nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las verdades de
Aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable” (1 Pedro 2:9). Quiere
decir, que para poder anunciar con efectividad las virtudes del Evangelio,
tenemos que ser gente santa.
En el Antiguo Testamento, cuando
un sacerdote manchaba, o deshonraba su ministerio con adulterio, fornicación o
idolatría, Dios los excluía, los eliminaba del ministerio, y lo más que Dios les
permitía, después que se arrepentían, era ser porteros en el templo. Y hoy día,
si tantos adúlteros y fornicarios que manchan y deshonran el ministerio y los
púlpitos, salieran del ministerio y se arrepintieran, ¡cuantos porteros habría!
Hermano, hermana, si Ud.
encuentra que en su vida hay cosas, conversaciones, vocabulario, modas,
costumbres, maneras de vivir que no son santas, que no agradan a Dios, es mejor
que usted se humille en la presencia de Dios, le pida perdón y le prometa
abandonar tales cosas para entrar plenamente en el Camino de Santidad, porque
SIN SANTIDAD, NADIE VERÁ AL SEÑOR.
Amados, yo he cumplido con mi
responsabilidad de predicar y de adoctrinar, usted asuma la responsabilidad de
escuchar y obedecer. Le invito a obedecer. Dios les bendice!!!
“Gracia y Paz”
Aprendiendo la Sana Doctrina
¿CONOCES TÚ AL VERDADERO JESÚS?
Mateo 1:18-25
“El nacimiento de Jesucristo fue
así: Estando desposada María su madre con José, antes que se juntasen, se halló
que había concebido del Espíritu Santo. José su marido, como era justo, y no
quería infamarla, quiso dejarla secretamente. Y pensando él en esto, he aquí un
ángel del Señor le apareció en sueños y le dijo: José, hijo de David, no temas
recibir a María tu mujer, porque lo que en ella es engendrado, del Espíritu
Santo es. Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Jesús, porque él salvará a
su pueblo de sus pecados. Todo esto aconteció para que se cumpliese lo dicho
por el Señor por medio del profeta, cuando dijo: He aquí, una virgen concebirá
y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con
nosotros. Y despertando José del sueño, hizo como el ángel del Señor le había
mandado, y recibió a su mujer. Pero no la conoció hasta que dio a luz a su hijo
primogénito; y le puso por nombre Jesús”.
La gente tiene muchas ideas
diferentes acerca de quién es Jesús, pero no son muchos los que realmente le
conocen. Como cristianos, tenemos muy buenas razones para creer que Jesús no
fue un simple profeta o un carismático predicador, como algunos dicen. Jesús es
el Salvador prometido por Dios. Primeramente porque en él se cumplieron cientos
de profecías del Antiguo Testamento. Por ejemplo, siglos antes de que
Jesucristo naciera, el profeta Isaías anunció su nacimiento virginal: “Por
tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a
luz un hijo, y llamará su nombre Emanuel” (Isaías 7:14). Del cumplimiento de
esta profecía nos habla el pasaje de hoy.
En Miqueas 5:2 el profeta Miqueas
reveló el lugar exacto donde él nacería: “Pero tú, Belén Efrata, pequeña para
estar entre las familias de Judá, de ti me saldrá el que será Señor en Israel”.
Pasaron varios siglos, y esta profecía se cumplió cuando el ángel del Señor
proclamó a los pastores: “No temáis; porque he aquí os doy nuevas de gran gozo,
que será para todo el pueblo: que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un
Salvador, que es Cristo el Señor” (Lucas 2:10-11).
Vemos también en Ezequiel 34 que
Dios muestra su descontento con la forma en que los pastores trataban a su
pueblo, a quienes él llama “mis ovejas”, y por medio del profeta declara: “He
aquí yo, yo mismo iré a buscar mis ovejas, y las reconoceré” (Ezequiel 34:11).
Siglos mas tarde, Jesús declaró en Juan capítulo 10: “Todos los que antes de mí
vinieron, ladrones son y salteadores; pero no los oyeron las ovejas. Yo soy el
buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas”. Más adelante afirma:
“Mis ovejas oyen mi voz, y yo las conozco, y me siguen, y yo les doy vida
eterna” (Juan 10:27-28). Sin duda una prueba irrefutable de la declaración de
Jesús en Juan 10:30: “Yo y el Padre uno somos”.
Muchas otras profecías referentes
a nuestro Señor Jesucristo se han cumplido a través de los siglos. Pero además
su vida en este mundo, limpia totalmente de pecados, su ministerio y todos sus
milagros muestran de manera incuestionable que Jesús es el único y verdadero
Hijo de Dios y nuestro prometido Salvador. Dondequiera que Jesús fue predicó la
verdad y enseñó acerca del reino de Dios. Siempre mostró a todos su amor y
consoló a los que sufrían, sanó los enfermos, y hasta levantó a algunos de los
muertos.
Sin embargo, el más importante de
todos sus logros fue reconciliarnos con el Padre y darnos la vida eterna a
través de su muerte en la cruz y posterior resurrección. Jesús dejó su gloria y
vino a este mundo con el fin de darse a sí mismo como expiación por nuestros
pecados, y para revelarnos al Padre de manera que nosotros pudiésemos tener una
relación personal con él.
Tu futuro eterno depende de lo
que tú creas acerca de Jesús. Piensa por un momento: A través de aquel
nacimiento milagroso en Belén vino el Mesías que proveyó el medio para que tú
puedas pasar la eternidad en el cielo junto al Padre. Él es más maravilloso de
lo que podríamos describir con simples palabras. Él es la promesa de Dios para
nosotros, y cuando creemos en él, viene a morar en nosotros para siempre, y nos
da vida eterna. ¿De verdad conoces tú al verdadero Jesús?
ORACIÓN:
Padre santo, gracias por tu precioso plan de salvación, que comenzó con
el nacimiento de Jesús y terminó con su muerte y su resurrección. Capacítame
para conocer íntimamente a tu Hijo amado y así poder disfrutar plenamente de
tus bendiciones. En el nombre de Cristo Jesús, Amén.
“Gracia y Paz”
Dios te Habla
LA FIDELIDAD DE CRISTO
Juan 9:4
“Conviéneme obrar las obrar del
que me envió, entre tanto que el día dura: la noche viene, cuando nadie puede
obrar”.
Cuando Jesús vino a este mundo, traía
tareas especificas que El Padre le había preparado. Él sabía la obra que tenia
delante, y sabía que el tiempo era limitado para cumplir con ello. Si se
demoraba, no podría hacer todas las cosas que El Padre le había apuntado, pero
cuando se acerco el fin, Él podía decir en su oración al Padre: “Te he glorificado en la tierra, he terminado
la obra que me diste” (Juan 17:4).
¡Precioso Jesús, tú fuiste fiel
en todo, hasta la muerte cruel en la cruz!
Asimismo debemos seguir el plan
que Dios tiene para cada uno de nosotros; ¿Y de ello, que tanto has hecho? ¿Qué
no has hecho? ¿qué te falta para hacer? Ya vemos las sombras que nos dicen que
se acerca la noche. En este mundo somos como viajeros en un tren, mirando por
la ventanilla las escenas que van pasando tan rápido. solo tienes una vida.
¿Qué estas haciendo con ella?
“Gracia y Paz”
Un Versículo de la Biblia cada Día
PARA BAJAR DE PESO NO TE QUEDA OTRA QUE PRACTICAR ESTAS PALABRAS !!!
Estas palabras que comienzan con
P pueden orientarlo para llevar adelante un cambio en su estilo de vida, ¡si
usted se lo propone!
*
Paciencia
La naturaleza es lenta, los
cambios se instalan de a poco. Pasar de la lactancia materna a una alimentación
variada puede llevarle a un niño por lo menos un año. Si usted estuvo meses,
años o toda la vida comiendo y moviéndose de un modo “engordante”, el reemplazo
de este hábito requiere de mucha paciencia y práctica.
*
Participación
Comprometerse con otras personas
suele fortalecer el cambio. Participar de un grupo de autoayuda puede ser una
excelente opción.
*
Perdurable
Cualquier dieta se puede sostener
durante un par de semanas. Hasta la más extravagante. Pero, ¿usted quiere
resolver su problema de una manera duradera? ¿Es este otro noviazgo corto con
la dieta o está decidido a comprometerse con un hábito de vida saludable?
*
Personal
Su plan de alimentación y
movimiento se irá armando de a poco. Usted combinará de una manera personal e
intransferible las sugerencias que recibe de su nutricionista, su médico o los
coordinadores y participantes del grupo para bajar de peso. Lo que es
conveniente para otra persona no necesariamente lo es para usted.
*
Plan B
Si de una manera no funciona,
pase a otra. Tenga siempre a mano una alternativa para cuando algo falle. Sea
perspicaz, creativo, anímese a ir probando.
*
Peso
Un plan sirve sólo si el
resultado a largo plazo se ve en la balanza. Para notar mejor los cambios,
además de pesarse semanalmente, complete la Curva de Peso. Ese gráfico le permitirá registrar
hasta esos inocentes doscientos gramos que sube de una semana a otra y que
pueden frustrarlo a fin de mes. O, al contrario, alegrarse por esos trescientos
que baja, lenta pero sostenidamente. Ver estas variaciones a tiempo permite
hacer ajustes, lo cual aumenta las posibilidades de éxito.
*
Planificar
El desorden muchas veces es
simplemente un orden puesto al servicio de comer de manera engordante. Debemos
reordenar: ordenar de una manera diferente. Es conveniente planificar la
compra, el transporte, el almacenamiento, la preparación, el servicio, la
ingesta, el desecho, el acto de comer afuera, las fiestas y las vacaciones.
Todo debe contemplarse para no autoengañarse. Vea Precaución.
*
Practicidad
Debe ser fácil y práctico. Si la
primera vez se enganchó en un plan complicado, puede adjudicarlo a su calidad
de novato... La segunda vez, también. Pero después de varios fracasos con
dietas difíciles de llevar a la práctica conviene preguntarse si no hay un
pequeño deseo, más o menos inconciente, de que nada cambie... La practicidad es
clave a la hora de evitar excusas, tanto en la comida como en el movimiento.
*
Práctica, práctica, práctica…
Tenemos la neuroplasticidad
positiva a nuestro favor: la capacidad de hacer conexiones neuronales nuevas
que nos permitan respuestas convenientes a nuestro objetivo de bajar de peso y
mantener los logros. En este camino de reemplazar hábitos viejos, la repetición
es fundamental. Insistir en los cambios una y otra vez es lo que asegura,
trabajo mediante, la incorporación de conductas saludables.
*
Precaución
La comida está siempre presente
en la vida. No se engañe con los "imprevistos". Planifique y
manténgase alerta: las viejas respuestas están al acecho, esperando la
oportunidad para manifestarse nuevamente.
*
Paladar
Quizás debe cambiar la frecuencia
en que come, o achicar la porción, o modificar la receta para bajar un poco el
contenido de grasa o azúcar. Pero siempre respetando su paladar. Si no lo hace
tendrá más probabilidades de abandonar pronto su plan para adelgazar y su
entrenamiento en el cambio de hábitos, que deben durar para toda la vida. Vea
Placer.
*
Parecido
Lo que usted come debe ser lo más
parecido posible a lo que come su familia y el entorno que lo rodea. Es posible
hacer algo raro durante un tiempo corto. Por ejemplo, llevarse la vianda a un
casamiento. Será el héroe de la fiesta. Pero, ¿cuánto le puede durar esta
estretegia? En cambio, practica la moderación, verá que haciendo una colación
antes de una reunión para no llegar con hambre, buscando otras distracciones
lejos de la comida (baile, charla con amigos), sirviéndose lo que va a comer en
un plato tamaño postre podrá hacer lo mismo que el resto de los invitados. Y
sostener su plan sin esfuerzo y sin que nadie lo note.
*
Partida
Cuantas más veces coma durante el
día, más se activará su metabolismo y tendrá menos apetito. En cambio, comer
pocas veces facilita que la comida se asimile con mayor facilidad.
*
Pausada
Ayuda mucho comer masticando bien
los alimentos. La sensación de saciedad no sólo se produce por la cantidad de
comida que comemos. La orden de parar de comer tarda un tiempo en llegar al
cerebro. Entonces, cuanto más rápido coma, más habrá ingerido cuando llegue la
hora de detenerse, y se habrá llenado de calorías innecesarias.
*
Permisos
Este es el nombre erróneo que se
le suele dar a una comida rica y engordante. ¿Quién se lo da o se lo quita?
Nadie más que usted puede hacerlo. ¿Por qué el nombre es erróneo? Porque es
mejor sacarle la sensación de excepcionalidad, ya la comida rica debe formar
parte de su plan. ¿Cómo regularse? Eso depende del momento que usted esté
transitando: si está fuerte y desea bajar más rápido, quizás puede hacer su
plan más estricto. En cambio, si atraviesa un momento de “energías dietéticas
bajas”, le conviene concentrarse en mantener el orden y la distribución de las
comidas, darse más gustos (así preferimos llamarlo) y aceptar que adelgazará un
poco más lento hasta que recobre otro ritmo. Esta es la realidad del
tratamiento: variar, alternando las exigencias con usted mismo/a. ¿Quién
decide? Sólo usted.
*
Placer
Comer es un placer que se puede
tener varias veces por día. Si usted se priva de él, no logrará que el plan sea
perdurable. ¿Recuerda los Permisos?
*
Pluralidad
La comida debe ser variada, tanto
para obtener los nutrientes indispensables para mantenerse sano como para evitar
el aburrimiento. Ponga ingenio a la hora de pensar qué va a comer. Usted puede
comer rico y a la vez sano. Hay muchas preparaciones deliciosas no engordantes
que pueden ser prácticas y ayudarlo a dar variedad y color a su comida.
*
Porciones
Todo es diet si se cuida la
porción... y viceversa: todo puede engordar si se exagera (salvo, por ejemplo,
las gaseosas o la gelatina light, que contienen poquísimas calorías). Hay mucha
gente que se las arregla para engordar comiendo alimentos light. Usted puede
ser flexible en la porción, en la calidad del alimento, o en la grasa /azúcares
que aporta. Pero si descuida todas estas cosas no está siendo flexible sino
permisivo. Por ejemplo, comer una fuente de ensalada es flexibilidad con la
porción; comer un alfajor lo es con la grasa (Un alfajor es una golosina
tradicional de Argentina, chile y otros países de Iberoamérica, compuesto por
dos galletas unidas por un relleno dulce y generalmente bañadas en chocolate o
glaseado. El relleno suele ser de dulces de frutas, dulce de leche o mousse de
chocolate). Para un obeso de 200 kilos, 6 empanadas puede ser flexibilidad;
pero para uno de 80 es casi un atracón. Si elige de postre 2 bolas de helado,
es flexible con el azúcar y la grasa… si come ½ kilo está siendo permisivo.
Le propongo reflexionar sobre
estas palabras antes de pensar en conquistar un peso sano. Aunque hay muchas
más que pueden ser útiles para iniciar un cambio en su estilo de vida, éstas
son disparadores para pensar en aspectos que conforman el acto de comer, y
pueden ayudarlo a mantener su descenso de peso para siempre... ¡disfrutando de
sus logros mientras adelgaza!
SIEMPRE CONSULTA A TU MEDICO, para
que mantengas tu cuerpo sano.
“Gracia y Paz”
Fuente: Fundación Alco
SI CREES QUE AMAS A TU PAREJA MIRA ESTE VIDEO
Historia de amor de Ian y Larissa
Los designios de Dios para el
matrimonio en la Biblia
pintan al esposo amando a su mujer del modo que Cristo ama a su pueblo, y a la
esposa respondiendo a su esposo de la manera que el pueblo de Cristo debe
responderle a Él. Este cuadro estaba en la mente de Dios cuando envió a Cristo
al mundo. Él vino por su esposa y murió por ella para mostrarnos la manera en
que el matrimonio debe ser.
La increíble y conmovedora
historia de amor de Ian y Larissa ilustra que la idea divina para el matrimonio
es demostrar el amor que conserva el pacto entre Cristo y su Iglesia. Presta
especial atención a las palabras que los novios solicitan que sean leídas en su
boda.
(Dale Click a este link para ver
el video)
“Esta clase de amor es posible porque Cristo murió tanto por el marido
como por la mujer. Sus pecados son perdonados. Ninguno necesita hacer que el
otro sufra por los pecados. Cristo ha llevado ese sufrimiento. Ahora como dos
personas pecadoras y perdonadas podemos devolver bien por mal”. John Piper
“Gracia y Paz”
Noviazgo y Matrimonio