¿Qué dice la Biblia acerca del Papado?.
En los últimos tiempos el mundo se vuelca en elogios acerca de la figura del papa,
fieles católico-romanos y personalidades del mundo honran al que se hace llamar
“santo padre”. Desde el profundo respeto que nos merece cada persona como
creación de Dios, pretendemos enunciar lo que la Biblia enseña acerca del
papado.
Honra,
veneración y usurpación de la Gloria de
Dios.
El Obispo de Roma se hace llamar
“Vicario de Cristo”, “Santo Padre”, “Su Santidad”, “Cabeza de la Iglesia”, incluso, en su
exaltación, hemos visto y oído a muchos escribir en velas al penúltimo de los
papas “Juan Pablo II, te adoramos”, y “Papa nuestro, que estás en los Cielos”.
¿Es correcto todo esto?, ¿honra o deshonra a Dios?.
El caso de un hombre que no dio
la gloria a Dios, cuando el rey Herodes arengaba a los ciudadanos de Tiro y
Sidón, la multitud exaltada clamó a él “¡Voz de Dios y no de hombre!”, la Escritura nos dice que
“Al momento un ángel del Señor le hirió, por cuanto no dio la gloria a Dios; y
expiró comido de gusanos” (Hechos 12:23). Dios castigo al corrupto Herodes por
permitir que los hombres le dieran una gloria que sólo pertenece a Dios, ¿se
atreve el papado a recibir de los hombres títulos aún más divinos como “Santo
Padre” y “santidad”?.
El que se sienta en el templo de
Dios. La Biblia
dice que en los últimos tiempos vendrá un hombre que se hará pasar por Dios,
ese hombre ocupará el papel de Dios el Hijo (Vicario de Cristo), y de Dios el
Espíritu Santo (vocero de Dios, infalible y autoritativo), 2 Tesalonicenses 2:3-4 dice: “Nadie os engañe en ninguna
manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el
hombre de pecado, el hijo de perdición, el cual se opone y se levanta contra
todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se sienta en el
templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios”.
¿Qué es lo que hace el que se
hace llamar “Santo Padre”?, se sienta en la Iglesia de San Pedro, en su trono papal, los
reyes se arrodillan ante él y le besan su mano, lo visten con vestiduras que
aparentan santidad, con esto cumple las blasfemas pretensiones de aquel otro
anticristo que se nos describe en 2 Tesalonicenses 3:
1- se levanta contra Dios
poniéndose en lugar de Dios
2- se sienta en el templo de Dios
como Dios
3- se hace pasar por Dios (usando
títulos divinos).
¿Es esto el sencillo cristianismo
de la Biblia,
o una malvada imitación de hombres tremendamente poderosos? No, definitivamente
la Biblia no
lo aprueba.
Verdaderos siervos de Dios que
rechazaron la exaltación del pueblo. Cuando Pablo y Bernabé, por mano de Dios
sanaron a un cojo de nacimiento en la ciudad de Listra, el populacho confundió
a Bernabé con Júpiter y a Pablo con Mercurio, la gente quiso ponerle guirnaldas
y sacrificar toros, pero ellos, alarmados les dijeron: “Varones, ¿por qué
hacéis esto? Nosotros también somos hombres semejantes a vosotros, que os
anunciamos que de estas vanidades os convirtáis al Dios vivo” Hechos 14:14.
¿Qué dijeron los siervos de Dios?: “¡nosotros también somos hombres semejantes
a vosotros!”, ¡somos sólo hombres!, podían haber dicho “¡no, no somos Júpiter y
Mercurio!, pero nos tenéis que llamar “santidad”, tenéis que besarnos la mano,
y tenéis que arrodillaros”, ¡no!, ellos jamás hubieran permitido esto, y
cualquiera que pretenda ser siervo de Dios y consienta en recibir estos
honores, no sólo no es un siervo de Dios, sino que es un blasfemo, puesto que
sea por ignorancia, o con intención, recibe de hombres como él, algo que sólo
Dios debe recibir.
Lujo,
palacios y tesoros que el verdadero Hijo de Dios no tuvo.
El llamado “Papa” reside en sus
palacios, es Jefe del estado del Vaticano, que tiene embajadores en todo el
mundo, hace pactos con naciones, colabora en derribar gobiernos, posee tesoros
y obras de arte incalculables, veranea en su palacio de Castelgandolfo (sí,
hemos dicho bien, en su palacio de verano), posee bancos, tierras, joyas,
cuando viaja por el mundo lo hace con su cocinero privado, tiene
guardaespaldas, viste de forma distinta para parecer más santo… pero ¿aprueba
Dios ese lujo en aquellos que dicen ser sus siervos? Veamos lo que dice la Biblia:
Mateo 8:20 “Jesús le dijo: Las
zorras tienen guaridas, y las aves del cielo nidos; mas el Hijo del Hombre no
tiene dónde recostar su cabeza”. Muchas veces Jesús no tuvo dónde pasar la
noche, ni transporte, ni hoteles, ni cocineros privados, ni palacios de verano.
Juan 4:6-7 “Entonces Jesús,
cansado del camino, se sentó así junto al pozo…. Vino una mujer de Samaria a
sacar agua; y Jesús le dijo: Dame de beber”. En su servicio a los demás, Jesús
recorrió a pie los polvorientos caminos de Israel, sintiéndose cansado y
sediento.
Mateo 7:15 “Guardaos de los
falsos profetas, que vienen a vosotros con vestidos de ovejas, pero por dentro
son lobos rapaces”. La apariencia no lo es todo, un hombre puede aparentar gran
santidad, pareciendo una oveja del Señor, un verdadero creyente, pero por
dentro es un lobo, es decir, alguien que se aprovecha de los sencillos
creyentes, ¿con qué dinero se construyen los Papas esos palacios?, con el
dinero de las ovejas a las que esquilman y engañan. Recordad que la Iglesia de San Pedro se
financió vendiendo bulas, es decir, a cambio de dinero pretendían tener poder
para sacar del purgatorio las almas de los familiares.
Hechos 20:34-35 “Antes vosotros
sabéis que para lo que me ha sido necesario a mí y a los que están conmigo,
estas manos me han servido. En todo os he enseñado que, trabajando así, se debe
ayudar a los necesitados, y recordar las palabras del Señor Jesús, que dijo:
Más bienaventurado es dar que recibir”. El ejemplo del apóstol Pablo era el de
trabajar para no ser carga a los creyentes, en lugar de abusar de ellos,
servirles él a ellos, no pidiéndoles dinero, sino ganándose el sustento y
predicando el evangelio gratuitamente.
Apocalipsis 17:1-6 “Vino entonces
uno de los siete ángeles que tenían las siete copas, y habló conmigo
diciéndome: Ven acá, y te mostraré la sentencia contra la gran ramera, la que
está sentada sobre muchas aguas; con la cual han fornicado los reyes de la
tierra, y los moradores de la tierra se han embriagado con el vino de su
fornicación. Y me llevó en el Espíritu al desierto; y vi a una mujer sentada
sobre una bestia escarlata llena de nombres de blasfemia, que tenía siete
cabezas y diez cuernos. Y la mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, y
adornada de oro, de piedras preciosas y de perlas, y tenía en la mano un cáliz
de oro lleno de abominaciones y de la inmundicia de su fornicación; y en su
frente un nombre escrito, un misterio: BABILONIA LA GRANDE, LA MADRE DE LAS RAMERAS Y DE
LAS ABOMINACIONES DE LA TIERRA. Vi
a la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de
Jesús; y cuando la vi, quedé asombrado con gran asombro”. Esta es una
descripción de la falsa iglesia de Roma, quien pretende ser la esposa de Cristo
(una mujer), pero es una ramera, los reyes de la tierra fornican con ella
(hacen pactos), se viste con grandes lujos (vers. 4) que ha ganado con sus
pactos con los reyes, y es perseguidora de los creyentes.
Algunos dicen, “sí, el Papado
tiene grandes riquezas, pero es que tiene una gran labor que hacer, viajes,
etc…”. Esto son excusas, el apóstol Pablo realizó continuamente viajes, que
para la época eran mucho más costosos y dificultosos, pero no por ello vivió en
palacios, Jesús dijo: “He aquí, los que llevan vestiduras delicadas, en las
casas de los reyes están” (Mateo 11:8), a las personas le impresionan los lujos
y cómo visten otros, a Dios no. Los lobos con piel de oveja, los que roban al
pueblo de Dios, siempre tienen excusas para justificar su vida de lujo y
ostentación, pero esos argumentos no tienen ningún valor cuando comparamos sus
vidas con las de los verdaderos siervos de Dios.
¿Santo?
¿Padre?.
Uno de los títulos más blasfemos
que tiene el papado es el de “Santo Padre”. Lo que realmente pretende es
transmitir una falsa idea de santidad, vestiduras blancas, su trono papal, el
resto de obispos arrodillándose ante él, veamos la sencilla enseñanza de las
Escrituras:
No debemos arrodillarnos ni
venerar a otro (imagen u hombre) fuera de Dios... (Éxodo 20:4; 1 Crónicas 16:9).
No debemos llamar “Padre” a otro
sino a Dios (Mateo 23:9).
Debemos exaltar y honrar a Dios
por encima de toda otra criatura (Apocalipsis 19:1).
Vicario
de Cristo… ¿o falso Cristo?.
El mismo Señor Jesús nos avisó
que una señal de los últimos tiempos serían falsos cristos y falsos profetas, “Entonces,
si alguno os dijere: Mirad, aquí está el Cristo, o mirad, allí está, no lo
creáis. Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes
señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los
escogidos” (Mateo 24:23-24)
“Hijitos, ya es el último tiempo;
y según vosotros oísteis que el anticristo viene, así ahora han surgido muchos
anticristos; por esto conocemos que es el último tiempo” (1 Juan 2:18).
La Biblia enseña que hay un
solo mediador entre Dios y los hombres, y ese es Cristo Jesús (1 Timoteo 2:5),
no es María, no es la Iglesia,
y tampoco es el “Papa” (cuyo título de “Sumo Pontífice” alude a su supuesta
mediación), es Jesús. Los falsos maestros nos quieren hacer creer que los
necesitamos a ellos para acercarnos a Dios, pero al único que necesitamos es a
Jesús mismo “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os
haré descansar” (Mateo 11:28). Es a Jesús a quien tenemos que acercarnos,
porque sólo en Él hay salvación “Y en ningún otro hay salvación; porque no hay
otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos” (Hechos
4:12), no es en el nombre de Roma donde está la salvación, o en el nombre de
María o de los Papas, sino en el nombre de Jesús, tú puedes estar lejos de la
iglesia de Roma, pero cerca de Cristo, podrías estar excomulgado por esa
iglesia, pero con tus pecados perdonados en el nombre del que SÍ hay salvación,
que es el nombre de Cristo, ellos (los lobos) dicen que necesitas de su ayuda
para recibir el perdón de pecados, porque son los que administran los
sacramentos que supuestamente traen la Gracia y el perdón ¡qué blasfema falsedad!. Invoca
el nombre de Jesús (Romanos 10:13) y serás salvo.
El falso vicario de Cristo ha
pretendido usurpar su lugar, engañando y enseñando cosas contrarias a las que
Cristo nos enseñó, este falso Cristo enseña a hacer imágenes y venerarlas,
enseña a acudir a Dios por medio de María, enseña que los sacramentos
administran la Gracia
de Dios, enseña que él tiene el poder y las llaves que abren o cierran el
Cielo. No hay engaño más descarado de la pureza, la verdad y la belleza de
Jesús, el verdadero Hijo de Dios, el único Cristo, y el único Salvador (Efesios
5:23).
¿lOS
PapaS QUE HAN MUERTO EstaráN en el Cielo?
Para muchos fieles católicos-romanos
sí, en cambio para otros no es tan seguro, al menos hacen misas y ofrecen
oraciones por sus almas. Esa es la esperanza del falso evangelio predicado por
Roma, no ofrece seguridad de perdón de pecados, puesto que no creen en la
salvación por Gracia, por medio de la fe (Efesios 2:8-9) sino en la salvación
por medio de la fe y las obras (sacramentos, penitencias, misas, etc.). El fiel
católico romano espera llegar al Cielo, pero no está seguro de eso, mientras
que el cristiano instruido en la
Palabra de Dios sabe que sí irá al Cielo (Juan 5:24).
¿Irá El Papa al Cielo?, depende
de en Quien haya creído como Su Salvador:
¿Confió en la mediación de María
para recibir el perdón de Dios?
¿Creyó que los sacramentos le
daban Gracia para permanecer en santidad?
¿Confió en sus obras para
alcanzar la misericordia de Dios?
¿Creyó que por el hecho de ser
bautizado fue hecho hijo de Dios según la doctrina católico-romana?
¿Descansó en el hecho de
pertenecer a la “única iglesia verdadera” como garantía de su salvación?
¿Creyó que a pesar de ser
pecador, podía acumular méritos para salvar su alma, o para salvar las almas de
otras personas?
¿Creyó que María es co-redentora
juntamente con Cristo?
Si la respuesta a estas preguntas
fue sí, entonces, la Biblia
dice que NO irá al Cielo, sino que estará recibiendo el castigo por sus pecados
en el infierno, por cuanto:
Romanos 3:10 “No hay justo, ni
aun uno”. Nadie merece la salvación.
Efesios 2:8-9 “Porque por gracia
sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no
por obras, para que nadie se gloríe”. La salvación no es por obras, sino por fe
en la muerte de Jesucristo.
1 Pedro 3:18 “Porque también
Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para
llevarnos a Dios, siendo a la verdad muerto en la carne, pero vivificado en
espíritu”. Cristo es el único justo, y murió por los injustos como la única
manera para reconciliarnos con Dios
Romanos 10:9 “que si confesares
con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó
de los muertos, serás salvo”. Bautizarse, o confirmarse no es necesario para
ser salvo, sino creer de forma personal en Jesucristo como tu Salvador.
Juan 5:24 “El que oye mi palabra,
y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha
pasado de muerte a vida”. Si hemos creído en Jesucristo como único y suficiente
Salvador tenemos la
SEGURIDAD de que nuestros pecados han sido perdonados.
Amado hermano y amigo, ¿en quien
has puesto tu fe?, puedes ser muy sincero en tus creencias, pero estar
equivocado, puedes creer que la aspirina cura el cáncer, pero por más sincero
que seas, no harás que eso se convierta en verdad, de la misma manera puedes
creer que los sacramentos que la
Iglesia de Roma administra te pueden llevar a la salvación, o
que María puede llevarte al Cielo, y estarás aún perdido en tus pecados.
¿Qué puedes hacer ahora?, puedes hablar
con Dios, reconociendo que eres pecador e incapaz de ir al Cielo, y que crees
sólo en Jesucristo como tu Salvador y Dueño y que en ningún otro hay salvación.
“Gracia y Paz”
Tiempos de Apostasía